Para el banco, su reputación es una cuestión tan importante como la procedencia de los fondos, pero lo cierto es que poca gente repara mucho en esto. En el mundo digital, siempre quedan rastros de información que pueden utilizarse para formarse una opinión sobre la reputación de sus clientes, incluso si no utilizan las redes sociales. En las fuentes abiertas se puede encontrar algo de cada uno y eso vale para todos.
Los bancos las utilizan para buscar información en la web y en bases de datos especializadas (Lexis Nexis, World Check). El objetivo del banco es formarse una opinión de usted como cliente. Para el banco, la falta de información equivale a una imagen digital negativa.
Esta cuestión debe tratarse con tiempo, antes de dirigirse al banco, es necesario analizar y hacerse una idea de la opinión que el banco pueda hacerse sobre usted, e intentar corregir los aspectos negativos, aunque usted no los considere como tales. Hay que mirarlo todo con los ojos del banco.